El tipo que veis en la foto es un auténtico hijo de puta.
¿Por qué?, os preguntaréis.
Pues porque ha intentado ralentizar el ritmo de escritura de mi novela enviándome un videojuego perverso y adictivo que se llama Canabalt.
Y yo, que soy igual de hijo de puta, os dejo aquí el enlace, para que el Canabalt arruine vuestras vidas:
http://www.freewebarcade.com/game/canabalt/
Lo curioso del asunto es que resulta útil, el cabrón.
A veces uno entra en bucle mientras escribe. Se bloquea en una frase. Sabe lo que quiere contar pero no encuentra las palabras idóneas para contarlo. De pronto te das cabezazos contra un muro. Una y otra vez. Te obsesionas con combinaciones de palabras que no sirven pero que te obligan a visitarlas una y otra vez, impidiéndote pensar en otras direcciones.
En esos momentos abres el Canabalt y empiezas a jugar. Entonces tu mente se relaja, abandona el bucle, empieza a correr con el protagonista del juego, saltando de edificio en edificio hasta que rompes una cristalera en la pantalla del ordenador, y otra en tu mente, y encuentras la frase que buscabas, y dejas el juego, y la escribes en la novela.
Y, claro... luego vuelves a echar otra partidita, pa celebrar que has dado con la frase.
Creo que la novela va viento en popa. Hace poco atravesé el ecuador. Espero no tardar mucho en acabarla. Será cuestión de días, o semanas. Y como los días están compuestos por segundos, qué cojones... Será cuestión de segundos.
8 comentarios:
Tienes razón, el tipo de la foto tiene pinta de ser un hijodeputa sin escrúpulos, con sus alitas entre nubecitas.
Te habría contestado de inmediato, pero estaba ocupado echándome una partidita al Canabalt para celebrar que he escrito un post.
Nooo, no quiero procrastinar!
- Siii, si que quieres
Nooo, que me iba bien escribiendo el puto DEA hoy...
- Es solo un ratito, ¿que malo te puede pasar?
Aaarg, bueno solo un poco...
...y mi vida se fue al carajo :D
Voy a probarlo, me habéis convencido mi consciencia y tu.
Tranquilo primo, que tú tienes fortaleza mental para doblegarlo.
De hecho, como experto en psicología animal que eres, detectarás enseguida las claves que lo hacen adictivo: El hecho de que consista en apretar un único botón, generando ritmos hipnóticos. El hecho de que sea tan fácil pasar del final de una partida al inicio de otra, apretando ese mismo botón que se usa para todo. El error que tanta rabia te ha dado y la posibilidad de enmendarlo están a un solo botón de distancia, a un solo milisegundo. Y el hambre de velocidad. Y la sensación circular en la que no hay principios ni finales de las etapas para dosificar el contenido...
Pues igual que el "Ninja run" pero sin ninjas.
Osea, peor.
fortaleza mental... emm... sí... supongo
acabo de terminar mi primera partida con Ninja Run con cerca de 5872 m... muy fácil para un ninja entrenado, me he dejado morir porque no pasaba nada :D
Échale un vistazo a este a ver que te parece :D
También es de solo un botón.
Qué concepto más bueno, qué estética más encantadora y qué vicio!!! Definitivamente, tú quieres retrasar mi novela ;P
Gracias por el enlace!
Publicar un comentario