martes, 23 de diciembre de 2014

¿QUIÉN ESTÁ DETRÁS DE LOS TESTS DE FACEBOOK? LA OSCURA VERDAD


Cada vez están más presentes en la red social. Casi todos estaréis familiarizados con ellos, casi todos habréis hecho uno o dos... o cuatrocientos.

Me refiero a esos tests que inundan Facebook en los últimos tiempos. "¿Qué personaje mitológico eres?" "¿Qué raza de perro eres?" "¿Qué personaje de Tim Burton eres?" "¿Qué clase de escritor eres?"

¿Quién está detrás de esos tests? ¿Se trata de una iniciativa espontánea?

Si indagáis un poco os daréis cuenta de que casi todos esos tests están desarrollados por dos o tres empresas. Si seguís indagando, comprobaréis que todas ellas son filiales de una empresa algo más grande llamada Krutchner Inc. ¿Queréis que sigamos indagando? A partir de aquí la cosa se pone un poco más difícil, porque Krutchner Inc. es a su vez de una filial de otra filial que, en última instancia, trabaja para el CNI: El servicio español de inteligencia.

Si hacéis esta clase de tests en inglés, también descubriréis que están desarrollados por unas pocas empresas que, en última instancia, pertenecen a la CIA.

De esta manera, mientras nosotros intentamos (ingenuamente) averiguar "Cuál sería nuestra ciudad ideal", respondemos a todo tipo de preguntas: Nuestro color favorito, nuestras expectativas sentimentales, nuestro ideal de felicidad, nuestro fin de semana perfecto, nuestra forma de reaccionar ante los problemas.

Toda esa información se almacena en bases de datos y es procesada mediante algoritmos informáticos, creando perfiles psicológicos y predicciones de comportamiento de cada uno de nosotros. Averiguar "qué clase de hamburguesa sois" os hace infinitamente menos libres, por varias razones:

- Pueden usar esa información para conoceros mejor de lo que os conocéis a vosotros mismos, para anticiparse a vuestras decisiones, para haceros sentir vacíos cuando quieren venderos algo que en realidad no necesitáis.

- Pueden usar esa información para elaborar perfiles psicológicos de cada uno de vosotros y conduciros hacia el lugar que quieren que ocupéis, a base de suministrarnos estímulos positivos y negativos: Es como guiar a un coche hacia donde tú quieres controlando qué semáforos le pones en rojo o en verde; qué calles le pones con dirección prohibida y cuáles no.

- Si alguno de nosotros protesta, si alguno de nosotros se vuelve rebelde (con un tipo de rebeldía distinto de la que ellos tienen aceptada y controlada) usarán toda esa información para saber controlarnos, extorsionarnos, humillarnos.

Todo esto que os acabo de contar me lo he inventado. La empresa Krutchner Inc. no existe. A partir de ahora me inventaré conspiraciones de vez en cuando y las escribiré en este blog.  Las llamaré "inspiranoias". Si un día de estos aparezco muerto en una cuneta, a lo mejor resulta que he acertado con alguna por error.